Los aceites sintéticos son una combinación de aceites y aditivos que acentúan ciertas propiedades (antidesgaste, antipolución, anticorrosión, etc.) y son apropiados para los motores más demandantes y de más alto rendimiento, así como para condiciones extremas (altas temperaturas, presión alta).
Te damos 15 razones para usar aceite sintético:
- Fluye fácilmente en climas fríos, por lo tanto no hay pérdida de lubricación cuando el aceite está frío. Es altamente resistente a la descomposición de la viscosidad (la habilidad del aceite de fluir fácilmente en todas las temperaturas) a causa de alta temperatura, fricción, contaminantes químicos.
- Intervalos de cambio largos: 8.000 a 11.250 kilómetros entre cambios de aceites (comparado con 4800 para aceite regular). Algunas personas han documentado hasta 40.250 kilómetros entre cambios. Sin embargo, no sugerimos que pase tanto tiempo.
- El costo es el doble que el del aceite convencional. Sin embargo, dura más.
- Mejor desempeño de viscosidad en temperaturas bajas, altas y extremas.
- Mejor Índice de Viscosidad (IV).
- Mejor estabilidad química.
- Disminución en la pérdida por evaporación.
- Resistencia a la oxidación, daño térmico y problemas de sedimentos en aceite.
- Posibilidad de intervalos de drenaje extendidos con el beneficio ambiental de menor generación de residuos de los aceites quemados.
- Economía de combustible mejorada en ciertas configuraciones del motor.
- Mejor lubricación durante encendidos en condiciones climáticas frías extremas.
- Posibilidad de extensión de la vida útil del motor.
- Protección superior contra “cenizas” y otras formaciones de depósitos en puntos calientes del motor (particularmente turbo-cargadores y super-cargadores) para menos quema de aceite y reducción en las oportunidades de obstrucción en los conductos de lubricación.
- Incremento en los caballos de fuerza y torque debido a menor resistencia inicial en el motor.
- Mejora en la Economía de Combustible.