El filtro de aire es un elemento esencial del motor que se encarga de garantizar que el aire que llega a los cilindros para mezclarse con el combustible está completamente limpio y libre de impurezas. De lo contrario, diferentes partes del motor quedarían contaminadas y acabarán sufriendo daños irreparables.
Es importante que el proceso de combustión de la mezcla de aire y carburante sea óptima, por lo que la función del filtro de aire es esencial. Con un aire limpio, conseguiremos optimizar el rendimiento del motor, evitar averías y mantener el lubricante más limpio.
A diferencia de lo que ocurre con otros elementos de un vehículo, el filtro de aire no es una pieza cara ni complicada de sustituir, por lo que merece la pena invertir en uno que sea adecuado para nuestro motor y la exigencia que le pedimos con relación a nuestra rutina de conducción.
BENEFICIOS DE UN BUEN MANTENIMIENTO DEL FILTRO DE AIRE
Si el filtro de aire está sucio e impide el paso adecuado del aire, durante la conducción podemos observar síntomas como pérdida de potencia y, de no solucionarlo, ello puede desencadenar averías en otras partes del motor.
Por tanto, mantener nuestro filtro de aire en correcto estado nos proporciona los siguientes beneficios:
- Correcto flujo de aire.
- Correcto suministro de aire.
- Calidad de aire mejorada en un 99%.
- Mayor resistencia a las altas temperaturas.
- Menor riesgo de averías.
Sin embargo, un filtro de aire sucio o en mal estado puede:
- Aumentar el consumo de combustible.
- Reducir la potencia.
- Desgastar prematuramente piezas internas.
- Incrementar la emisión de gases y partículas contaminantes.